A la hora de limpiar prendas textiles, no debemos confundir los términos “Detergente” y “Jabón” debido a que cada uno de ellos tiene funciones y propiedades diferentes ya que se elaboran para distintos cometidos.
El jabón es una sustancia con dos partes, mientras que el detergente es una mezcla de muchas sustancias.
En 1907 una compañía alemana fabricó el primer detergente al añadirle al jabón tradicional perborato sódico, silicato sódico y carbonato sódico. El nombre elegido fue “PERSIL” (PERborato + SILicato).
Centrándonos en este último diremos que existen bastantes ideas erróneas así como usos indebidos.
- Dosificación:
Cuando vamos a poner la lavadora, corremos la tentación de no hacer caso a las indicaciones del fabricante, siendo la tendencia a echar la cantidad a ojo. Es una costumbre que debemos atajar si queremos ahorrar, obtener buenos resultados y aportar nuestra contribución a un mejor medio ambiente
Si los paquetes de detergente vienen calculados para entre 40 y 50 lavados de media, echar los polvos a ojo, sin usar los dosificadores, puede reducir la duración de cada uno de ellos entre cinco y diez lavados, A lo tonto, podemos malgastar dos euros por paquete por un simple gesto descuidado.
Si echamos más jabón del recomendado, la lavadora produce más espuma de la necesaria y aunque parezca en principio un problema visual: la ropa sale más apelmazada, ha lavado peor y es probable que algunas manchas que normalmente tienen poco problema en desaparecer esta vez ni siquiera se hayan ido.
Pero, además, hay un problema económico a largo plazo: la lavadora sufrirá mayor desgaste, puesto que no conseguirá hacer los enjuagados y los desagües de agua de manera completa. Es decir, que posiblemente te duré menos o te dará problemas técnicos antes de lo esperado – una lavadoras tiene de vida útil, una media aproximada de diez años -.
En la dosificación, es mejor quedarse corto que pasarse.
- ¿Cual elegir?
Mi recomendación parte en diferenciar los tipos de ropa en función de sus colores. Estos los dividiremos en dos grupos: Blancos y Color.
- Ropa Blanca:
Detergente en polvo especifico para este tipo de prendas ya que añaden productos blanqueantes y están diseñados para obtener y respetar la blancura original de los artículos.
- Ropa de Color:
Detergente liquido específico para este tipo de prendas. Al ser líquidos se disuelven con mayor eficacia que los sólidos y están concebidos para una protección y reavivado del color.
Por otra parte el factor Biodegradable es importante a la hora de elegir el detergente, éste aportara un uso más razonable y sostenible en la labor diaria del lavado de prendas.
Dedicando un poco te atención a la hora de comprar el detergente basado en la información que el fabricante aporta, hará que seamos mejores usuarios de este producto y en consecuencia mas conscientes en su aplicación.