¿Porqué no elimino la mancha?
Esta es una pregunta frecuente entre los usuarios de tintorerías, al comprobar que la mancha aún sigue visible en la prenda. ¿Porqué no elimino la mancha?
Muchas veces, resulta complicado contestar a esa pregunta debido a la existencia de factores que determinan el lograr desaparecer la molesta mancha.
Veamos cuáles son esos factores.
La suma de las distintas combinaciones entre origen de las manchas, su antigüedad, características de los tejidos y naturaleza de tintes, hacen que el resultado sea positivo o negativo.
Dicho de otro modo, no es lo mismo trabajar una mancha relativamente reciente, que una mancha antigüa.
Tampoco es lo mismo poder garantizar al cien por cien, desprender de un tejido compuesto de fibras naturales respetando su color, una mancha que está compuesta por un colorante natural o artificial, como podría ser por ejemplo el vino tinto, el chocolate o la tinta.
La combinación de estos cuatro factores, «MANCHAS», «TEJIDOS», «TINTES» y «TIEMPO», dará un resultado positivo o negativo.
Los profesionales sabemos o intuimos que ciertas combinaciones pueden dar origen a uno de estos resultados y eso es lo que debemos evitar o conseguir.
Bien es cierto que hoy día existen factores determinantes, los tejidos y tintes tienen otros sub factores añadidos como son los accesorios y las confecciones. Muchas veces impiden lograr los resultados deseados porque sus materiales y características hacen arriesgado el proceso que nos permite devolver a la prenda su estado original.
Todos estos motivos son los causantes de la pregunta inicial y las respuestas pueden ser tan variadas que necesitaríamos muchas páginas para darles contestación.
Nosotros somos los primeros interesados en querer obtener los resultados esperados y porque esas prendas se nos confiaron y están en nuestras manos. Pero tenemos un limite, una frontera, una línea que separa un trabajo bien echo, de un accidente y es tan fina que de traspasarla toda responsabilidad recae en nosotros según el criterio de los legisladores.
Resumiendo, sepa que cuando se le realiza esa pregunta a un profesional que no elimina una mancha, no es por su gusto, capricho o falta de profesionalidad, piense todo lo contrario y dele la oportunidad de expresarse, ya que la prudencia en la que se basa y la diligencia con la que actúa es merecedora de su respeto y confianza.
Nos ganamos la vida en base a eliminar manchas, pero no a toda costa.